LA MÚSICA CUBANA
EL JAZZ CUBANO
Grandemente influenciada por las raíces africanas de la nacionalidad cubana, la música de este país caribeño tuvo un gran desarrollo gracias a los músicos populares "pardos y morenos", responsables de su africana.
La música cubana es la expresión de los ritmos traídos a la Isla especialmente por los colonizadores españoles y por los negros esclavos procedentes de África. También, en menor medida, hay una cierta influencia asiática, que puede notarse en el uso de la corneta china en la conga de los carnavales, un hecho que comenzó con la llegada de los primeros inmigrantes chinos a la isla. A partir de 1848 llegaron numerosos culíes chinos a Cuba, llegando a sumar unos 100,000 para 1860.
Según el origen de sus influencias, podríamos hacer una división fundamental entre la música euro-cubana y la afro-cubana, y de una muy extensa derivación de ambas, con sus variadas manifestaciones populares a través de los años y por las cuales la música de Cuba ha sido siempre reconocida a través del mundo y por muchas generaciones.
Cualquier clasificación que se pretenda hacer de la música cubana dependerá más bien del grado de mezcla entre las influencias europeas y africanas que se descubran en ella. Ahora bien, reducirla a esta clasificación sería demasiado simple, pues en realidad la música cubana es el rico y complejo
resultado de la fusión creativa de estas dos fuentes, al que se ha adicionado históricamente la influencia de las más diversas culturas y tendencias musicales.
En las Músicas Folklóricas Cubanas, producto de la síntesis de elementos de antecedentes Africanos y euroasiáticos, se impusieron las primeras, porque durante siglos la población de origen africano fue el estrato básico "folk" de nuestra sociedad.resultado de la fusión creativa de estas dos fuentes, al que se ha adicionado históricamente la influencia de las más diversas culturas y tendencias musicales.
En la época en que surge la nacionalidad cubana, dicha población constituía más de la mitad de los habitantes de la Isla y controló durante siglos la profesión de músicos, una de las poquísimas posibilidades de ascensión social de que disponían las clases libres de origen africano durante el régimen esclavista.
"Los músicos populares pardos y morenos fueron los grandes artífices de la música folklórica cubana y los responsables de su africanía", como escribiera el maestro y tercer descubridor de Cuba,
Fernando Ortiz, uno de los grandes investigadores de la cultura de esta isla caribeña.
Fernando Ortiz, uno de los grandes investigadores de la cultura de esta isla caribeña.
Toda música tiene una significación social; de la sociedad recibe sus voces, instrumentos, timbres, tonos, ritmos, melodías, géneros y estilos, y sólo en la sociedad está su resonancia humana. El arte del negro es un arte transido de socialidad. El negro africano, procedente de diversos grupos culturales, estaba influyendo básicamente en la música y en el baile, en el uso del lenguaje y en la imaginería popular.
El panorama del siglo XVIII fue árido en cuanto a la descripción de manifestaciones folklóricas. La influencia de la música ritual negra llegaba a los salones de bailes a través de la inclusión del tambor,
objeto de veneración y culto por unos, profanado y prohibido por otros; considerado como mensajero de los dioses y encarnación de los antepasados en las religiones negras de Cuba; víctima de secuestros y acuchillamientos por autoridades reaccionarias y racistas.
objeto de veneración y culto por unos, profanado y prohibido por otros; considerado como mensajero de los dioses y encarnación de los antepasados en las religiones negras de Cuba; víctima de secuestros y acuchillamientos por autoridades reaccionarias y racistas.
En 1794 aparece publicado un romance en el que se describe un baile y se menciona ya la contradanza. Por esos años se destacaban los músicos populares. Uno de ellos, humilde negro habanero, era compositor de música ligera, contradanza y danza. Esto ilustra ya una fase del desarrollo de una expresión de música nacional. Al componer un negro contradanzas y danzas,
éstas se veían impregnadas de un nuevo matiz.
El danzón se gesta a través de la contradanza francesa y la danza bailable en el laboratorio del teatro vernáculo criollo y de la inspiración de los danzantes que cubrían la demanda bailable de salón, la citadina y la rural (Buelta, Flores, Faílde, Valenzuela).éstas se veían impregnadas de un nuevo matiz.
El patrimonio folklórico cubano registra distintos elementos de integración y formas tan disímiles que van, desde las supervivencias africanas, hispánicas y haitianas, hasta las expresiones
totalmente decantadas que, como el son, el danzón y la rumba (guaguancó, yambú y columbia) evidencian el aporte equilibrado de esas tres raíces, amén del toque lírico proveniente de la ópera italiana y el teatro vernáculo.
Si el son oriental y habanero se desarrolla y alcanza su plenitud entre determinados grupos
semiprofesionales (agrupaciones de son, cuartetos, sextetos y septetos) enmarcados en zonas urbanas, la rumba representa la expresión cabal de la creación popular del sector o estrato más humilde de las zonas urbanas, suburbanas (yambú y guaguancó) y rural (columbia) del pueblo cubano ya integrado culturalmente.
Siendo el toque yoruba, el bantú y el carabalí, expresiones artísticas rituales primigenias de la madre África, que sus hijos lograron conservar, influyendo, incluso, en el dogma y prácticas católicos al concepto y uso del pueblo cubano, la rumba y sus variantes representan las expresiones más directas del pueblo en su creación profana o pagana.
La Rumba, La Danza y La Contradanza
Hasta nuestros días, y gracias al teatro vernáculo, en el cabaret, el cine y la televisión comerciales, cubanos y extranjeros, se tiene un concepto erróneo, e incluso procaz, de la fisonomía musical, literaria y coreográfica de la manifestación folklórica más genuina del patrimonio artístico cubano: la rumba.
descubierta (decretándose el "vacunao" marcado por el pie del rumbero y el parche del "quinto" o "repicador") ha servido a los teatristas del género vernáculo cubano, a los rumberos de "show" de
cabarets, cine y televisión, para deformar totalmente una danza elegante, con una bien encubierta meta sexual.
En el extranjero esta deformación ha llegado a extremos fantásticos en todo sentido. Con un desconocimiento total del cuerpo sonoro y coreográfico de la rumba, se ha pretendido identificar todos los géneros vocales del cancionero y las danzas cantadas de la música popular cubana con ella, dada la propaganda interesada y comercial impulsada por las grandes compañías discográficas norteamericanas, en las que la etiqueta de "rumba" vende todo lo producido en el área del Caribe y las Antillas.
El danzón, baile nacional de Cuba, tiene sus antecedentes históricos en la contradanza francesa. Como consecuencia de la revolución haitiana a fines del siglo XVIII, llegaron a la isla de Cuba gran
cantidad de colonos franceses con sus familias y dotaciones de esclavos.
cantidad de colonos franceses con sus familias y dotaciones de esclavos.
La mayoría de ellos se radicó en la antigua provincia de Oriente, de ahí que la contradanza francesa sienta sus predios en Cuba y fuera prontamente cultivada, asimilada y cubanizada por los criollos, a
partir de la presencia del negro en las orquestas, a extremo tal, que en menos de una década acusaba, tanto en la coreografía como en la música, el sello inconfundible de los elementos más característicos de la idiosincrasia popular cubana.
partir de la presencia del negro en las orquestas, a extremo tal, que en menos de una década acusaba, tanto en la coreografía como en la música, el sello inconfundible de los elementos más característicos de la idiosincrasia popular cubana.
de agosto de 1879), su danzón Las alturas de Simpson, no hacía otra cosa que ponerle música a un baile de figuras muy popular por esa época, denominado danzón.
Los distintos elementos aportados por Faílde dan paso a una forma mediante la cual, se pueden canalizar todos los rasgos sustanciales del conglomerado de géneros, estilos y formas que se conjugan en la música popular cubana, como las vivencias africanas y españolas.
El Guaguancó
En los siglos XIX y comienzos del XX hicieron su aparición los coros famosos de guaguancó, denominados popularmente Paso Franco y Los Roncos, de los barrios del Pilar y Pueblo Nuevo, respectivamente.
vinculados a la Potencia Abakuá, Coro de Clave, Pendón de Negros Curros, Cabildo Lucumí y Sociedad de Recreo, de sus barrios respectivos, desataron y mantuvieron durante varios lustros una pugna tensa por demostrar una superioridad artística en cuanto a la calidad y belleza de sus cantos y
expresiones literarias; de escenarios naturales servían los patios de solares (La Jacoba, La Siguanea) y algunos teatros de barrios capitalinos.
EL SON
Hay que recordar que la música latina comenzó con un ritmo, el son, que se puede considerar el tronco del árbol...(Max Salazar) Nacido en las comunidades rurales del Oriente Cubano (no lejos de Santiago y Guantánamo) a principios de siglo, a base de ritmos africanos y letras de
estructura europea, el son es el padre de casi todos los ritmos cubanos y el origen de la salsa.
estructura europea, el son es el padre de casi todos los ritmos cubanos y el origen de la salsa.
breves, alusivos a asuntos del entorno vital, y el instrumental sonoro, remiten a lo insular primigenio.
Cuba, en el Oriente de la isla. Allí confluyeron, a lo largo del siglo xix, circunstancias socioeconómicas, y fenómenos culturales, con su amalgama afrohispanocubana, más ingredientes de los sectores provenientes de Haití, que propiciaron el encuentro recreador. Ya en las décadas finales del siglo, se concretó el género musical, y entró a las calles de la capital oriental, donde
sentó su impronta sonora. Se menciona a Nené Manfugás, como el músico espontáneo que
llevó a Santiago de Cuba, en 1892, en el jolgorio de las fiestas carnavalescas, los primeros sones montunos.
El son montuno basa su estructura literaria en la copia o cuarteta, llamada
regina en la región oriental, que culmina en el diálogo solista-coro, en el
estribillo obligado.
La Contradanza
regina en la región oriental, que culmina en el diálogo solista-coro, en el
estribillo obligado.
La Contradanza
De origen europeo, llegada a Cuba por tres caminos diversos -por hilo directo desde las cortes de la metrópoli, con los barcos ingleses que tomaron La Habana en 1762, y con los franceses y sus servidores negros y mulatos establecidos en la región oriental, a principios del ochocientos, debido a la Revolución de Haití- había sufrido un proceso de criollización paulatina, que devino la danza cubana, dueña de una mayor libertad expresiva, asentada, en lo coreográfico, en la pareja enlazada, con evidente influjo afroide en su ritmo. Precisamente, al aumentar sus partes formativas, al extender su tiempo bailable, se le empezó a dar el calificativo de danzón.
Ya en la década del setenta del siglo pasado, en Matanzas, se denominaba así al baile dancístico de figuras. Y por eso Miguel Failde, atento al hecho folklórico-musical, puso como título a sus números
escritos para esta danza, el nombre genérico de danzón. Alejo Carpentier encontró cuatro, de 1878: El delirio, La ingratitud, Las quejas y Las alturas de Simpson. Este último, dedicado a un barrio popular matancero, fue el que resonó entre los bailadores que concurrieron al Liceo la noche memorable.
El danzón
Uno de los bailes nacionales de Cuba, representa un fenómeno de lógica evolutiva, una síntesis de elementos antecedentes que se encuentran a un superior nivel. Su forma consta de una introducción, parte de clarinete, introducción repetida, y trío de metales. Naturalmente, este formato corresponde a la orquesta de viento, integrada por cornetín, trombón de pistones, figle, dos clarinetes, dos violines, contrabajo, timbales y güiro.
Posteriormente el género continuaría su desarrollo, y surgen creadores como Raimundo Valenzuela, compositor y trombonista destacado, quien junto a Enrique Guerrero y el cornetinista Félix Cruz, modificaron el aspecto interpretativo, al punto de agregar una parte final coreada por la orquesta, en sus respectivos danzones.
Si de un género de música cubana se ha escrito poco, no obstante su importancia, es de la conga. El son, el danzón, la rumba, el bolero; aun el punto cubano, la guaracha, la canción... han sido más
afortunados. Distintos investigadores y musicólogos los han hecho objeto de estudio, brindándonos aportes valiosos.
Bolero
El bolero, nacido en Santiago de Cuba durante la segunda mitad del siglo XIX, se expandió rápidamente por el ámbito del Caribe y, más tarde, por diferentes países latinoamericanos.
El bolero, nacido en Santiago de Cuba durante la segunda mitad del siglo XIX, se expandió rápidamente por el ámbito del Caribe y, más tarde, por diferentes países latinoamericanos.
Heredero de la canción de prosapia hispánica -teñida fuertemente por los elementos de las arias operísticas, la romanza francesa y la canción napolitana-, pero que ya había sufrido un proceso de cubanización, tiene en el aspecto rítmico un evidente nexo con la danza y la habanera.
Dice Argeliers León, refiriéndose a sus orígenes, que "...fue surgiendo en el siglo pasado un nuevo estilo en el acompañamiento guitarrístico, mezcla de rasgueado y punteado que, a no dudarlo, nos llegaba nuevamente por el camino de renovados contactos con sones yucatecos.
La presencia de familias y tropas, venidas de las recién instauradas repúblicas latinoamericanas, y el creciente tráfico entre México y los puertos del sur de Cuba, desde los años de la retención de la zona de San Juan de Ulúa por tropas españolas (1825), motivó todo ello la introducción de un rayado rítmico, muy segmentado y constante en la guitarra prima, acentuado tonalmente en la guitarra segunda. Se producía así un nuevo estilo en el acompañamiento que, al llamarle bolero, era como decir bolereadamente".
En la Isla, sonaba el bolero español, así como los polos y tiranas, pero de aquél sólo incorporó el nuevo género criollo el nombre, ya que su estructura, en compás de dos por cuatro, difería, aparte de los otros aspectos constitutivos, del tres por cuatro del baile español. Con respecto a la
denominación hay varias hipótesis. El modo cancioneril cubano la tomó directamente de su homónimo hispánico, pero el bolero peninsular pareció inspirarse en su modo danzable, como volando, boleando.
En la Isla, sonaba el bolero español, así como los polos y tiranas, pero de aquél sólo incorporó el nuevo género criollo el nombre, ya que su estructura, en compás de dos por cuatro, difería, aparte de los otros aspectos constitutivos, del tres por cuatro del baile español. Con respecto a la
denominación hay varias hipótesis. El modo cancioneril cubano la tomó directamente de su homónimo hispánico, pero el bolero peninsular pareció inspirarse en su modo danzable, como volando, boleando.
CHA-CHA-CHA
En 1951, la Orquesta América sigue los pasos del Ritmo Nuevo de Arcaño pero un
músico joven y ambicioso de la orquesta llamado Enrique Jorrín realiza una
nueva variación sobre el Danzón y surge «La engañadora» con un nuevo ritmo al
que denomina Mambo-rumba. El nuevo ritmo gusta a los bailadores que improvisan
filigranas y sacan nuevos pasos que siguen el sonido marcado por el güiro en el
acompasamiento y originan un sonido nuevo con el ritmo de sus pies, naciendo de
ahí su nombre definitivo: Cha Cha Chá.Arcaño y la mayoría de las orquestas hablan eliminado para entonces los cantantes, los Danzones y el Ritmo Nuevo o Mambo que se interpretaba era eminentemente instrumental. Jorrín introdujo en el Cha Cha Chá pequeños coros e hizo cantar a todos los músicos al unísono consiguiendo que se oyeran las letras con más claridad, más potencia.
Jorrín crea su propia orquesta y viaja a Méjico con su Cha Cha Chá para seguir los pasos de Pérez Prado.
A la orquesta de Jorrín le sigue la Orquesta América y dejan el terreno libre a nuevas orquestas cubanas que toman el testigo del Cha Cha Chá en la isla como son las de Fajardo, la Orquesta de Neno González, la Orquesta Sensación, la Orquesta Estrellas Cubanas y la legendaria Orquesta
Aragón formada por Orestes Aragón en 1939 en la ciudad de Cienfuegos. La Aragón
cuenta, entre otros grandes músicos y compositores, con el magnífico flautista Richard Egüés, creador de «Bodeguero», tema que recorrería el mundo en la voz de Nat King Cole
Aragón formada por Orestes Aragón en 1939 en la ciudad de Cienfuegos. La Aragón
cuenta, entre otros grandes músicos y compositores, con el magnífico flautista Richard Egüés, creador de «Bodeguero», tema que recorrería el mundo en la voz de Nat King Cole
Guaracha
Es a mediados del siglo XIX cuando se observa la presencia de la guaracha dentro del teatro bufo habanero. Forma musical deudora de la tonadilla escénica hispánica, aunque permeada por la rumba antillana, fue desde sus inicios portavoz del espíritu festivo y satírico del cubano.
Es a mediados del siglo XIX cuando se observa la presencia de la guaracha dentro del teatro bufo habanero. Forma musical deudora de la tonadilla escénica hispánica, aunque permeada por la rumba antillana, fue desde sus inicios portavoz del espíritu festivo y satírico del cubano.
del régimen opresor peninsular. El 13 de enero de 1869, en el teatro Villanueva, en La Habana, se canta una guaracha que parece contener los elementos de ataque solapado: Ya cayó, en alusión a la guerra liberadora que se desarrollaba en tierras orientales.
Las guarachas se acompañaban de guitarras, junto a sonajeros como el güiro y las maracas. Luego se le incorpora el tres. Las voces de los guaracheros reiteraban el estribillo, donde el coro daba cobertura temática a las coplas entonadas por un solista. Crítica de costumbres, el gracejo cubano halló en ellas marco ideal para su estilo humorístico.
Género de canción campesina influenciada por el canto popular y rural hispano. De estructura sencilla -compás de tres por cuatro-, la melodía -acompañada por sólo una guitarra- es muy próxima a la melodía de la guajira flamenca.
Desarrolló una gran variedad de tonadas (melodías) con las que entonaban sus décimas o poesías. Debe su gran popularidad y riqueza a la improvisación de los repentista
Desarrolló una gran variedad de tonadas (melodías) con las que entonaban sus décimas o poesías. Debe su gran popularidad y riqueza a la improvisación de los repentista
Mambo
Género músical cantado y bailado. La primera persona que utilizó el nombre de Mambo ha sido Orestes López en un danzón intitulado "Mambo", en 1938. Esta música abarca elementos de
percusión del Son y algunas variaciones improvizadas para la flauta. En 1947, Dámaso Pérez Prado introdujo este ritmo en México donde tuvo un enorme éxito y lo hizo muy popular. El primer título conocido fue en 1951, con el nombre de "Qué rico Mambo". Podemos notar la ifluencia del jazz en los arreglos orquestales para los instrumentos de viento. Este baile posee sus propios pasos.
El Feeling
Genero situado en el contexto de la canción cubana. Surge, sobre la década del cuarenta del presente siglo, como necesidad de transformación en la manera de interpretar nuestro cancionero. Es notable la influencia de la música norteamericana. Su nombre - del ingles - indica que lo
que se ofrece tiene sentimiento, emoción. «Represento - al decir de Rosendo Ruiz, hijo - un movimiento renovador de fuerte raigambre trovadoresca, ya que, como en la trova tradicional, - sus principales cultores cantan acompañándose a la guitarra y en su gran mayoría eran de humilde extracción. Y, al igual que los trovadores anteriores, poco sabían de técnica musical. » Desde la década anterior, la música cubana había logrado resonancia universal. «La radio - dice
Ruiz - establece a trabes de los trovadores un dialogo, una comunicación con los oyentes.
EL PILÓN
Pacho Alonso y sus Bocucos trabajaron estrechamente con figuras como Faustino Oramas, el Guayabero y destacados cantantes integraron su banda como Ibrahim Ferrer y Carlos Querol.
Algo de lo más significativo de la carrera musical de Pacho Alonso fue en la mitad de la década de los años sesenta cuando el compositor Enrique Bonné,a quien le unía gran amistad desde que ambos eran pequeños, le propone la incorporación de su nuevo ritmo denominado Pilón. Pacho
acepta esta modalidad que tiene antecedentes en el órgano oriental y toma su nombre del rústico instrumento donde los campesinos molían el café.
EL SONGO
Ritmo creado en los años 70 por el percusionista José Luis Quintana, "Changuito" y el bajista Juan Formell. Músicos básicos de la orquesta "Los Van Van" que lo ha popularizado. Los elementos tomados del Son, el Rock, el Jazz y el set de percusión con la batería completa y otros instrumentos rítmicos afro-cubanos, incluyendo las pailas, fue a lo que Formell denominó Songo: "... que consiste en un diseño rítmico en la percusión, combinado con un tumbao en el piano, seguido por el bajo eléctrico a contra tiempo, obteniendo una cadencia muy bien lograda, que los bailadores identificaron inmediatamente, añadiendo nuevas figuraciones a las coreografías y acompañándola con golpes pélvicos y contoneos de movimientos lascivos...".
SUCU – SUCU
En la primera década del siglo XX la expansión de la industria azucarera generó migraciones de jamaicanos y puertorriqueños que se asentaron mayormente en Camagüey y Oriente. Entre el 1915 y 1935 evolucionaban nuevas formas musicales, entre ellas el Sucu-sucu, para muchos una modalidad
del son que se conoció primeramente en la Isla de Pinos.
changüi, la plena y otros ritmos caribeños de la época guardan estrecha relación unos con otros en cuanto a los esquemas rítmicos musicales y los pasillos bailables "escobillados".
Lo cierto es que fue muy popular sobre todo en el ambiente político y social de principios
del siglo XX en esa región de Cuba. Destaca como instrumento musical el güiro y
un machete rascado con alguna varilla de metal. El tres, marímbula, maracas,
bongó, claves y algún metal como raspador también están presentes en este
género. Genera un baile muy movido, de pareja, con pasos saltados, que aún se
estila en ciertas zonas del país.
del siglo XX en esa región de Cuba. Destaca como instrumento musical el güiro y
un machete rascado con alguna varilla de metal. El tres, marímbula, maracas,
bongó, claves y algún metal como raspador también están presentes en este
género. Genera un baile muy movido, de pareja, con pasos saltados, que aún se
estila en ciertas zonas del país.
Entre los Sucu-Sucu más conocidos están «Domingo Pantoja» y «Felipe Blanco», atribuido a Eliseo Grenet. Este último se refería a que Felipe Blanco quien gobernaba en Isla de Pinos durante la colonia española, denunciaba a los que no trabajaban. Pienso que posiblemente de ahí nació el
cubanismo para cuando alguien no trabaja decir: «está tirando un majá», «está
majaseando»; pues parte de la letra dice: «Los majáes no tienen cuevas Felipe
Blanco se las tapó, se las tapó, se las tapó, Felipe Blanco se las tapó.»
cubanismo para cuando alguien no trabaja decir: «está tirando un majá», «está
majaseando»; pues parte de la letra dice: «Los majáes no tienen cuevas Felipe
Blanco se las tapó, se las tapó, se las tapó, Felipe Blanco se las tapó.»
LA TROVA
Los términos de "vieja" y "nueva" trova se usan actualmente para diferenciar el estilo de las primeras
composiciones de los creadores del género, también llamada trova tradicional
cuyo cancionero ha dejado una ya clásica manera de decir, cuidando la belleza y
la limpieza de los textos características de la canción romántica mientras que
con "nueva" se reconocen las modernizadas maneras de creadores cuyos
estilos se corresponden más con la tendencia a la canción protesta.
Artes plásticas en cuba
Las artes plásticas cubanas es la expresión de la imaginería, pintura, escultura, cerámica, grabado, fotografía, arquitectura y diseño gráfico creados en Cuba. Las mismas son expresión de la pluralidad de concepciones estéticas traídas a la Isla especialmente por los
colonizadores españoles y por los negros esclavos procedentes de África. Con el
transcurso del tiempo y la cimentación de la Identidad Nacional Cubana se
fueron creando expresiones influenciadas por el resto de Europa, América Latina y los Estados Unidos, después de la irrupción del socialismo tuvo también una marcada influencia el arte soviético.
colonizadores españoles y por los negros esclavos procedentes de África. Con el
transcurso del tiempo y la cimentación de la Identidad Nacional Cubana se
fueron creando expresiones influenciadas por el resto de Europa, América Latina y los Estados Unidos, después de la irrupción del socialismo tuvo también una marcada influencia el arte soviético.
Las artes plásticas en el socialismo
Resulta tremendamente interesante observar cómo el ritmo de cambio en la expresión de la cultura alcanzó niveles sorprendentes, a partir del momento en que se colocó a tono con el devenir contemporáneo. En este proceso incidió como un hecho decisivo el triunfo de la
Revolución, el cual marca un cambio abismal en la proyección cultural y artística y por extensión.
La creación del consejo Nacional de Cultura, el Departamento de orientación Revolucionaria (DOR), el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográfica (ICAIC), la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), el CODEMA, estataliza el arte y lo encamina a ser propaganda política. Se atienden todas las opciones del Sistema de la Cultura en función
del desarrollo del arte en función de la política.
del desarrollo del arte en función de la política.
Las artes plásticas fueron testimonios del cambio acaecido y se sensibilizaron con la nueva proyección cultural y artística del proceso. Por supuesto, las expresiones plásticas se
harán receptivas a todo este movimiento en derredor del hombre y los nuevos caminos de la historia y los tomará en cuenta en sus nuevos derroteros expresivos.
La década del 60 presenta un marcado carácter épico y propagandístico, se hace eco de las nuevas tareas revolucionarias. En 1962 se fundan las Escuelas Nacionales de Arte (ENA), que da entrada a nuevas líneas de Educación Artísticas.
Durante esta década acaece el desarrollo de las líneas primitivistas, abstraccionistas, del pop y de otras vertientes que lidiaban con lo mágico. Hay una coexistencia de varias generaciones de artistas y la promoción de otros jóvenes como Carmelo González, Servando Cabrera, Angel Acosta León, Antonia Eiriz, Fayad Jamás, Raúl Martínez, Juan Moreira, César Leal, Umberto Peña y Salvador Corratge.
Durante la década del 70 hay una ampliación de temáticas y lenguajes artísticos. Puede verificarse la influencia de algunas corrientes del arte contemporáneo como el expresionismo, el fotorrealismo, una línea inspirada en los sueños o la imaginación y el arte pop. El arte abstracto tiene un significativo desarrollo específicamente en sus vertientes
óptica y cinética. Se destacan en esta época Pedro Pablo Oliva, Nelson Domínguez, Flora
Fong, Roberto Fabelo, Gilberto Frómeta Fernández, Ever Fonseca y Manuel Mendive. Cabe
destacar que en 1979, nace en La Habana Adrian Pellegrini del Riego, gran
innovador en el campo de la abstraccion, cuya obra de inspiracion musical se ha
reconocido mas en el ambito universal, y ejemplo unico de artista erudito e investigador.
En la década del 80 ocurre una ampliación del concepto de Obra de Arte, al superarse la idea de arte como objeto estéticamente complaciente, aparece la instalación que se presenta como una combinación de varios géneros, con un uso del espacio ilimitado. Así el artista se comporta como teórico y analista de su propia obra.
Característico es que se trata de llevar el arte a la calle, hacerlo masivo y popular utilizando cualquier medio expresivo que contribuya a concretar los objetivos conceptuales del creador. El artista concibe estrategias de inmediatez, como la agresión o la burla, para provocar la participación del público.
Temas fundamentales:
· El propio Arte
- El sexo.
- La política.
- Las Instituciones.
- La religión.
- La sociedad.
- La cultura popular.
Desde la herencia conceptual de los 80 se propone revalorizar los géneros individuales preocupados por la vuelta al oficio por parte del artista. Las nuevas estrategias de comportamiento del creador
se desplazan hacia el cinismo, la simulación, la pose.
se desplazan hacia el cinismo, la simulación, la pose.
Con el período especial, el arte problematiza sobre las condiciones socioeconómicas y se crea un gran interés de los artistas por vincularse a los circuitos de mercado y consumo de obras de
arte. Existe un gusto por el objeto terminado y estéticamente agradable que
muchas veces se enfatiza el contenido del mensaje
Cerámica cubana
Para hablar de cerámica artística en Cuba hay que remontarse a los inicios de los años 50, en un taller de cerámica propiedad del Dr. Rodríguez de la Cruz. Allí, fueron a trabajar los mejores pintores de la época, Amelia Peláez, Lam, Portocarrero, etc.
Muchas piezas de pequeño formato, producidas y decoradas por estos artistas, se
conservan en los principales museos de arte moderno y algunas en los fondos del
Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba.
Muchas piezas de pequeño formato, producidas y decoradas por estos artistas, se
conservan en los principales museos de arte moderno y algunas en los fondos del
Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba.